Legible. Definición: Que puede ser leído.

1. Diseño de la letra

Es posible afirmar que todos los tipos cuyo diseño es igual o similar a los tipos clásicos latinos (romanos) son los que ofrecen la mejor legibilidad. Hasta el momento el tipo que ofrece la máxima legibilidad en documentos impresos es Times New Roman diseñado por Stanley Morison en 1932 para ser usado especialmente para el periódico londinense Times.

2. Espaciado entre letra y letra y entre palabra y palabra.

Un texto cuyas letras se peguen unas sobre otras no ofrece buena legibilidad, ya que se dificulta la identificación de la letra. Asimismo, un texto excesivamente espaciado resulta también de lectura poco fácil, ya que se provoca confusión para distinguir si se trata de espacios entre letras o espacios entre palabras. Es fácil provocar este problema cuando se usa la alineación justificada (izquierda-derecha forzada) porque se generan espacios exagerados.

3. Tamaño de la letra.

Es obvio que una letra de tamaño grande es más legible que una letra de tamaño muy pequeño. Pero existe un tamaño ideal que anima y favorece la lectura: La letra de diez o doce puntos (la que se usó para escribir los párrafos de texto que en este momento está leyendo, estimado lector, es de 15 puntos). Conviene darse por enterado a este respecto que cuando menor es el hábito de lectura, mayor ha de ser el tamaño de la letra. Así, las lecturas para niños hasta 12 años han de efectuarse con tipos de doce a catorce puntos como mínimo. La escritura es una forma de comunicación y que como tal, mínimo debe poder ser leída. Facilitemos el proceso de lectura eligiendo tamaños de texto lo más grande posible. No olvidemos que después de los 40 años tenemos serios problemas para leer textos pequeños menores a 6 puntos.

4. La longitud de la línea.

Una línea muy larga compuesta por letras pequeñas en la que se encuentren muchas palabras entorpece la lectura ya que dificulta el paso del ojo de una línea a la siguiente. Sugerencia: usemos líneas de 40 letras, no usemos líneas de más de 70 letras. Observemos la longitud de línea de revistas hechas para ser leídas fácilmente como "Selecciones de Reader Digest" o "Contenido". Son líneas sumamente cortas que incluso facilitan la “lectura veloz”. Desde luego que para cubrir la pagina completa es necesario formar varias columnas.

5. El espaciado entre línea y línea.

Cuanto más densa es una línea y más pequeño es el cuerpo de una letra, más necesario es el espaciado entre línea y línea, llamado técnicamente en el área de las artes gráficas "interlineado".

6. El espaciado entre párrafo y párrafo.

El agregar una línea de "interlineado" facilita la lectura ya que permite leer bloque por bloque. Es muy útil para reanudar la lectura cundo haya interrupciones frecuentes. El recurso de agregar una línea entre párrafo y párrafo no es muy aceptado entre editores, ya que hace crecer el número de páginas de una publicacion. Cuando no sea posible agregar dicha línea se puede usar sangría de primera línea para identificar cada párrafo y conseguir que la lectura sea cómoda.

7. El estilo literario.

Digamos las cosas en forma clara, sencilla y concreta. No seamos profusos, difusos y confusos. Usemos el menor numero de palabras posible. No recurramos a palabras de uso poco frecuente o "rebuscadas". Practiquemos la buena lectura. De ser posible llevemos un curso de "redacción".

8. La calidad de la impresión.

Los documentos de uso cotidiano no siempre mantienen la calidad del original ya que van a ser reproducidos en imprenta o fotocopiadora, o van a ser fotocopiados de una fotocopia, o van a ser transmitidos por "fax". Un buen tipo de letra debe poder pasar estas pruebas.

9. Textos en Internet.

La mayoría de los conceptos anteriores fueron definidos para documentos impresos y antes de la existencia de Internet, sin embargo casi todos siguen siendo válidos. Internet y la lectura de texto en monitor hace necesario otro planteamiento en cuanto al tipo de letra a usar ya que los tipos romanos ya no son los más legibles.

Créditos

La fuente de información más importante para darle forma a éste estudio fue tomada del libro “Así se dibujan letras, rótulos y logotipos” escrito por José M. Parramon y editado por Parramon Ediciones, S. A. duodécima edición marzo 1988 y complementada por Manuel Vega Velázquez (mvegav47@gmail.com) para ser ser compartido entre los amigos que tengan algo qué decir a los demás y les interese hacerlo lo mejor posible. Cualquier comentario que ayude a completarlo se agradecerá. Gracias.

Primera edición: abril 23 de 1994. Primera revisión: octubre 2, 1997. Segunda revisión: junio 10, 2004. Tercera revisión: octubre 21, 2005.